lunes, 27 de enero de 2014

314. RUN AWAY.


También a mi 
me gustaría huir.

Huir como se huye
cuando no se hace
por razón del miedo.

Tumbarnos en el suelo
o en la roca más alta
pero saber que estamos
y que no vamos a parar.

Porque no hay nada como huir
ni nada mejor que tú y yo.

martes, 21 de enero de 2014

313. LA TALA.

Hace unos meses me llegó una invitación para participar en una convocatoria sobre el Holocausto a la que, para ser completamente sincero, no presté demasiada atención.

Pero ocurrió que la semana pasada fuimos a ver una película de amor y, cuando nos quisimos dar cuenta, la historia transcurría en un campo de concentración. Y las mariposas se convirtieron en un dolor de estómago.

Entonces me acordé de aquél árbol talado que fotografiamos una noche, volviendo de fiesta en Bellavista y entendí, en un segundo, lo que la noche de la foto se me había escapado.

La Tala es mi contribución a la convocatoria de mail art organizada por el Istituto Omnicomprensivo Statale de Casacalenda (Italia) con motivo de la celebración del Día de la Memoria

lunes, 20 de enero de 2014

312. LLEGÓ.

La bandeja de poliespán llegó, pese a su fragilidad, entera.

Me imagino que hubo un cartero que, al verla, la salvó del aplastamiento de la saca de correos y la colocó encima del resto de paquetes y cartas.

Decidme si esto no es razón suficiente para seguir creyendo en el ser humano. 

Porque, aunque nos hayan enseñado que, para sobrevivir, hay que ser fuertes, ocurre que, a veces, sólo mostrando nuestra fragilidad llegamos a conocer lo mejor de los que nos rodean.

jueves, 16 de enero de 2014

311. SOY UN FRESCO.

Hace unos días, mi amigo Salva me envió las bases para participar en una convocatoria para artistas noveles y emergentes, denominada Obra Fresca. Y dije sí.

Leyendo las bases me encontré con expresiones como "inquietud experimental" o "no os cortéis". Y dije sí.

Esto por no hablar de la carta al director que había leído por la mañana, sobre la hoja (de árbol) que llegó por correo desde Tailandia hasta Granada, para la convocatoria Esperanza Recuerda, en la que, por cierto, yo también había participado. Y dije sí, sí, sí.

Pero luego llegué a Correos, con la bandejita de poliespán franqueada y me dije no, no, no. Y me morí de la vergüenza. Y me acordé de mi amiga Carmen Herrera y de cómo ella piensa que el cartero de su pueblo, cada vez que recoge del buzón uno de sus envíos de mail art debe pensar  algo así como "¡Vaya, ya está aquí otra vez la loca esta". 

Mañana se inaugura la exposición y me imagino que, en breve, nos enteraremos de si la obra llegó o no llegó.

Yo estoy expectante. Para ver si el experimento funcionó. Y para comprobar si sigue vigente mi teoría, inventada, sobre la buena suerte de los números capicúas. 

miércoles, 15 de enero de 2014

310. TODO SALDRÁ BIEN.

Todo saldrá bien. 

Saldrá bien aunque para ello tenga que ir al médico de cabecera y solicitarle la baja laboral por esto que nos pasa. 

Esta enfermedad tan poco común.